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Ecuador, el ombligo del mundo 🇪🇨

Iglesia Cuenca Ecuador
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En esta ocasión les contaremos de Ecuador, un país amable que puedes recorrer fácilmente por tierra de manera económica. Si bien no hemos regresado, en el año 2013, cuando fuimos, andar en bus no te salía más allá de 2 dólares.

Lo mejor de Ecuador es que bastan unas pocas horas en bus para estar frente al mar, en la sierra, en la selva o, incluso, en una isla. Como es un país tan diverso, de a poco te iremos dando datos y narrando un poco de las aventuras vividas en estas altas tierras.

Esta aventura A pata pelada la viví con una gran amiga y durante 3 semanas recorrimos gran parte de este hermoso país, pese a que teníamos un presupuesto muy acotado. Los invitamos a leer la aventura de dos mujeres en Ecuador.

Cuenca, Ecuador

Tras un vuelo de Santiago con escala en Lima y Quito, llegamos a Cuenca, una ciudad que se ubica en el sureste de Ecuador, cercana a la sierra y a la cordillera. Por eso mismo y como dato, si no estás tan acostumbrado a los cambios de altura, vuela con tapones para los oídos. Evitarás un dolor terrible al aterrizar en estas alturas, que fácilmente puede derivar en una otitis.

Cuenca es la tercera ciudad más grande de Ecuador (después de Quito y Guayaquil) y posee una mezcla cultural muy notoria, donde se entrecruzan las iglesias coloniales con las ruinas incaicas.

Es conocida como la «Atenas de Los Andes» debido a su prolífera actividad cultural, patrimonial y científica. Estos mismos méritos la llevó a que fuera declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1999. Pese a ello, es una ciudad amable y tranquila, donde la gente está totalmente dispuesta a brindarte la ayuda necesaria, sin importar de dónde vengas.

Parque Nacional Cajas

Parque Nacional Cajas

Si bien Cuenca es una ciudad muy bella, nuestro objetivo era vivir la naturaleza en su máximo esplendor, así que nos dirigimos al Parque Nacional Cajas, parque ubicado a 4000 metros de altura, cifra considerable para quienes no están tan acostumbrados a la altura.

El paisaje que brinda este parque es impresionante y virginal, sin más que unos guanacos dando vueltas. Si bien fuimos en verano, en el altiplano ecuatoriano se siente un frío bastante intenso sin importar la época la época del año.

Tras un primer recorrido por el parque, decidimos quedarnos a descansar en el refugio que este tenía, ubicado en una pequeña colina con vista hacia una laguna que podía ser visitada en un trekking. En el refugio estábamos prácticamente solas pues la mayoría de las personas que visitan el parque hacen trekkings de días o de semanas, por lo que acampan en medio de la naturaleza, donde los pille el cansancio o la noche.

Tras reponer fuerzas, hicimos un trekking por parte del sendero turístico, que si bien no es tan grande, es difícil de hacer por el cansancio que provocaba la altura. Cuando parábamos, aprovechábamos de tomar fotos, para que cada pausa valiera la pena.

Definitivamente es un lugar para regresar con mucho tiempo y con el equipo adecuado. Luego de esta pequeña aventura y ya repuestas del largo viaje desde Santiago cargando nuestras pesadas mochilas, regresamos a Cuenca.

Hacer dedo en Ecuador 👉🏻

Durante lo poco que llevábamos de travesía, nos habíamos cuestionado si hacer dedo o autostop era una buena idea para mujeres solas. La verdad es que si bien en la teoría lo pensamos mucho y nos daba un poco de susto, cuando tuvimos la oportunidad de hacer dedo lo hicimos y ya.

Pese a que íbamos a esperar un bus, un camión nos paró y ofreció llevarnos. En él iban 2 camioneros hermanos guayaquileños ligados a la política ecuatoriana. Ambos tenían el sueño de cambiar su país, tal como uno lo piensa cuando es pequeño.

Siempre encontrarse con locales en los viajes te ayuda a comprender mejor la situación que atraviesa un país.

Ruinas de Ingapirca

De regreso en Cuenca, tomamos un bus hacia las ruinas de Ingapirca, un complejo arqueológico cañar, cultura preincaica que desapareció tras la invasión inca.

Este complejo está bastante bien conservado y cada uno de sus pórticos tiene una historia que contar. Las visitas son autoguiadas y puedes encontrar bastante información en el centro de ayuda al turista.

Tras nuestras paradas fuera de Cuenca, era hora de dejar esta ciudad. Así que después de la visita a Ingapirca y de varias peripecias en el camino (un bus que quería cobrarnos más del precio oficial por considerarnos «gringas»), emprendimos rumbo a Riobamba, una ciudad a 4 horas de Cuenca, cercana al volcán Chimborazo. De esta aventura, ya les contaremos detalles.

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